martes, 18 de agosto de 2015

El fenómeno de Raynaud

El fenómeno de Raynaud consiste en episodios de cambios de color en los dedos de las manos y los pies durante la exposición al frío o en respuesta a estrés emocional. En algunas personas también afecta las orejas, labios y nariz, puede afectar a personas de cualquier edad. Es posible que sea hereditario, pero hace falta hacer más investigaciones al respecto.

La forma primaria es la más común. Casi siempre comienza entre las edades de 15 y 25 años y aparece con más frecuencia en las:
  • mujeres,
  • personas que viven en lugares fríos.
La forma secundaria suele aparecer a partir de los 35 a 40 años. Es más común entre las personas con enfermedades del tejido conjuntivo, tales como esclerodermia, síndrome de Sjögren y lupus. Otras causas son:
  • síndrome del túnel carpiano, que afecta los nervios de las muñecas,
  • enfermedad de los vasos sanguíneos,
  • algunos medicamentos para la hipertensión, la migraña o el cáncer,
  • algunos medicamentos de venta sin receta,
  • algunos narcóticos.
Algunas ocupaciones podrían aumentar el riesgo de la forma secundaria de la enfermedad, entre éstas:
  • trabajos en contacto con algunos agentes químicos,
  • trabajos en los que se utilizan herramientas que provocan vibración, como el martillo neumático.
El cuerpo envía menos sangre a la piel para mantenerse caliente cuando siente frío. Para hacer esto, los vasos sanguíneos se estrechan.
Esta reacción natural al frío o al estrés es más fuerte en personas que padecen del fenómeno de Raynaud. Los vasos sanguíneos se estrechan más y más rápidamente que en casos normales. Esto se conoce como "episodio".
Durante un episodio, los dedos de las manos y los pies cambian de color. Pueden pasar del blanco al azul y después al rojo. También se pueden sentir fríos y entumecidos por la falta de circulación. Una vez acaba el episodio y la sangre vuelve a su flujo normal, puede sentir un dolor pulsante u hormigueo en los dedos. Cuando el cuerpo vuelve a estar tibio, la sangre comienza a circular normalmente en unos 15 minutos.


Luxación y esguince

Luxación 
Es una separación de dos huesos en el lugar donde se encuentran en una articulación. Las articulaciones son zonas donde dos huesos se juntan.
Una articulación luxada es una articulación donde los huesos ya no están en su posición normal. 
Puede ser difícil diferenciar entre un hueso luxado y un hueso fracturado. Ambas son situaciones de emergencia y se necesita el mismo tratamiento de primeros auxilios.
La mayoría de las luxaciones se pueden tratar en un consultorio médico o en una sala de urgencias. A usted le pueden dar un medicamento para hacerlo dormir e insensibilizar la zona. Algunas veces, se necesita anestesia general en el quirófano.
Cuando se tratan oportunamente, la mayoría de las luxaciones no ocasionan lesión permanente.
  • Las lesiones a los tejidos circundantes generalmente tardan de 6 a 12 semanas en sanar. Algunas veces, se necesita cirugía para reparar un ligamento que se rompe cuando hay luxación de la articulación.
  • Las lesiones a los nervios y vasos sanguíneos pueden ocasionar problemas permanentes o más prolongados.
Una vez que una articulación se haya luxado, tendrá mayor probabilidad de que esto suceda de nuevo. Se recomienda un control con un cirujano ortopédico después de una luxación.

Esguince 
Un esguince es una lesión de los ligamentos que se encuentran alrededor de una articulación. Los ligamentos son fibras fuertes y flexibles que sostienen los huesos. Cuando estos se estiran demasiado o presentan ruptura, la articulación duele y se inflama.
Los esguinces son causados cuando una articulación es forzada a moverse en una posición antinatural. Por ejemplo, la "torcedura" de un tobillo ocasiona esguince en los ligamentos que se encuentran alrededor de éste.


Genu varo y genu valgo

Son cuadros patológicos que afectan la alineación de las rodillas, y cada uno es contrario al otro, provienen de las palabras tomadas del latín en que “Genu”, significa rodilla, en tanto que “Varo” es al alejamiento de los miembros de la línea media del cuerpo, y “Valgo” es el acercamiento de los mismos.



 Genu varo: “Rodillas Arqueadas” o que se alejan de la línea media, y Genu Valgo “Rodillas que chocan” o rodillas juntas, en “X”.

 Esta alineación se puede presentar normalmente en distintas etapas del crecimiento del niño. Por lo que debe vigilarse el desarrollo natural de la alineación de las piernas en el plano coronal (de frente), estimado por el ángulo femoro-Tibial (ángulo que se forma entre el eje longitudinal del fémur y la tibia).

 Al nacer, el niño tiene de 10 a 15 grados de varo (separación) en la rodilla y piernas arqueadas persisten en la mayoría de los niños hasta los 14 a 18 meses, a veces hasta los 24 meses de edad, sin que se considere ser patológico (una enfermedad). Cuando el ángulo fémoro-Tibial se neutraliza en una línea recta, convierte en punto muerto la alineación de los fémures y tibias, entonces avanza hacia la línea media del cuerpo, o sea al valgo (choque de rodillas), como un rebote o sobre-corrección del arqueamiento que inicialmente tenía, esta es una posición de las piernas normal entre los 3 o 4 años de edad y luego gradualmente, se realinean en un valgo fisiológico o normal del adulto (alrededor de 7 grados) a la edad de 8 años.

 El examen físico de los niños que presentan deformidad de la alineación de las piernas en el plano coronal en general, se basa en la medición de la distancia entre los cóndilos femorales mediales (rodillas) del niño, para la deformidad en varo, y la distancia entre los maléolos mediales (tobillos) en la deformidad en valgo. Esta distancia es poco real, y no se considera una medición científicamente aceptada, o útil para su tratamiento por lo que se le llama pseudo-cuantificación de la alineación macroscópica de la piernas del niño, sin embargo, pueden ser utilizada con fines de vigilancia.

 Es más útil realizar una radiografía panorámica de ambas piernas con el paciente de pie, con apoyo de ambas pies, en posición antero-posterior (de frente), para el seguimiento documentado, midiendo los ángulos que forman los ejes del Fémur y la Tibia.

Diagnóstico:

 En primer lugar hay que hacer la diferenciación entre la presentación fisiológica o normal durante el crecimiento y desarrollo del niño y las verdaderas alineaciones patológicas. Pero se realiza con el examen físico que realiza el Ortopedista Pediátrico y la toma en su momento de radiografías panorámicas de miembros inferiores con apoyo bi-podálico.

 Principios de manejo:

La gran mayoría de los niños tienen las piernas “arqueadas” o rodillas que “chocan” que se resuelven espontáneamente, ya que son resultado de su crecimiento o del sobrepeso. Existen variaciones fisiológicas o normales que deben registrarse con fotografías periódicas, o revisando al niño en la consulta cada 3 a 6 meses aproximadamente, registrando su seguimiento.
No son indispensables tomar radiografías en cada consulta, pero si la alineación cae en límites patológicos, hay que encontrar que lo causa y atacarla, se deben consideraran todas las opciones de tratamiento.

Pie equino varo y equino valgo

El pie equino varo
También llamado pie zambo, es una malformación congénita del pie en la cual éste aparece en punta (equino) y con la planta girada hacia adentro (varo).
Su frecuencia es aproximadamente de 1 por cada mil niños, el 50% de los casos bilateral y es el doble más frecuente en niños que en niñas



Los estudios al microscopio de los tejidos muestran que los tendones de la cara posterior e interna de la pierna son mucho más densos, con más células y menos tejido laxo que los tejidos normales. Ello podría provocar un crecimiento anómalo de los mismos y desencadenar la deformidad progresiva en el feto durante su desarrollo a lo largo del embarazo. La postura es tan anómala que la disposición de los huesos en el pie zambo no es normal y la forma de cada uno de ellos tampoco es del todo normal. Los ligamentos  y músculos están demasiado tensos para permitir una correcta colocación de esos huesos con una simple manipulación.
Otras teorías hablan de una causa genética o familiar, de una causa mecánica, por falta de espacio para la formación del feto durante el embarazo, o bien de una detención precoz en el crecimiento del pie que hace que sus huesos no lleguen a ocupar su posición y forma correcta. 
En ocasiones se encuentra asociada a niños que sufren enfermedades neuromusculares, y aunque éstas son poco frecuentes es conveniente la correcta exploración del recién nacido para descartarlas.


pie equino valgo 
Algunos recién nacidos presentan los pies doblados hacia delante y arriba, de tal manera que el pie llega a tocar la parte anterior e inferior de la pierna (pie talo) y a veces el pie también está desviado hacia afuera.



Se trata de una de las deformidades posturales intrauterinas (fetal) más frecuentes. Estas deformidades posturales son más habituales en las madres primíparas, cuando hay poco líquido amniótico (oligoamnios), cuando el feto es muy grande o cuando la presentación es anómala (nalgas, transversa).

Feocromocitoma

Es un tumor  poco común del tejido de la glándula suprarrenal. Este tumor provoca la secreción de demasiada epinefrina y norepinefrina, hormonas que controlan la frecuencia cardiaca, el metabolismo y la presión arterial.
Un feocromocitoma puede presentarse como un tumor único o como más de una neoplasia. Por lo general, se desarrolla en la médula (centro o núcleo) de una o ambas glandulas suprerrena. En raras ocasiones, este tipo de tumor se presenta más allá de estas glándulas. Cuando esto sucede, normalmente es en alguna otra parte del abdomen.
Muy pocos feocromocitomas son cancerosos.
Los tumores pueden presentarse a cualquier edad, pero son más comunes desde comienzos hasta la mitad de la adultez.
Los síntomas ocurren durante ataques, los cuales suceden cuando el tumor libera hormonas. Los ataques generalmente duran de 15 a 20 minutos. Los ataques pueden incrementar en frecuencia, duración y gravedad a medida que el tumor crece. Se puede presentar hipertensión arterial de vez en cuando.


Pulsos de extremidad inferior

Pulso femoral

Explora la arteria femoral (arteria principal de las extremidades inferiores).
Se explora en la ingles a la altura de la parte inferior de del ligamento inguinal en la zona del triángulo de Scarpa.




Pulso poplíteo
Explora la arteria poplítea.
Se explora en la zona del hueco poplíteo en su parte medial y normalmente con la rodilla flexionada a 30 grados o en decúbito prono.



Pulso tibial posterior

Explora la arteria tibial posterior.
Se palpa en el tobillo a nivel de la zona posterior del maléolo externo (canal retromaleolar interno).


Pulso pedio

Explora la arteria pedia.
Se palpa a nivel de la cara dorsal del pie entre los tendones extensores de 1er y 2º dedo, también frecuentemente puede palparse entre el 2º y el 3º.


Pulsos de la extremidad superior

Pulso axilar

Explora la arteria axilar (arteria principal de las extremidades superiores).
Se palpa en línea medio axilar subyacente al húmero con el brazo en rotación externa. Debajo de las inserciones del pectoral mayor.


Pulso radial

Explora la arteria radial (rama de la arteria braquial, como la arteria cubital).
Se palpa en la cara interna de la muñeca. Es donde solemos tomar el pulso.

Pulso cubital

Explora la arteria cubital (rama de la arteria braquial, como la arteria radial).
Se palpa en la cara externa de la muñeca. Es donde solemos tomar el pulso.


pulso humeral 

se percibe la arteria humeral en el canal formado por los bordes internos de biceps y triceps, tambien en la parte interna del pliegue del codo, profundamente a la vena mediana basilica.


Signos de embarazo.

Signo de chadwick

Coloración violeta de la vulva y de la vagina que aparece después de seis semanas de embarazo como resultado normal de la congestión venosa local. Es un signo precoz de embarazo.


Signo de Hegar 

Signo de embarazo que se obtiene palpando el istmo uterino, que se reblandece durante el embarazo. Se produce, así, una relajación del istmo, que permite sospechar la existencia de embarazo.


Amenorrea 
Ausencia de menstruacion.


Mioma

Es un tumor sólido de tejido fibroso, por lo tanto, a menudo es conocido como tumor "fibroide". Los miomas varían en tamaño y número, generalmente tienen un crecimiento lento y normalmente no provocan síntomas. Los miomas que no producen síntomas no requieren tratamiento. 

Aproximadamente, el 25% de los miomas provocan síntomas y requieren un tratamiento.
Los miomas pueden crecer como un nódulo único o en grupos y su tamaño puede oscilar entre 1 mm hasta más de 20 cm de diámetro. Los miomas son lo tumores de la pelvis femenina que se diagnostican con mayor frecuencia, y son la causa más común para que una mujer se someta a una histerectomía. Aunque normalmente se les denomina tumores, no son cancerosos.

La causa de los miomas no está realmente determinada, pero la mayoría de los miomas se desarrollan en la mujer durante su etapa reproductora. Los miomas no se desarrollan antes de que el cuerpo comience a producir estrógenos. Los miomas tienden a crecer muy rápidamente durante el embarazo, cuando el cuerpo está produciendo más estrógenos. Cuando comienza la menopausia, generalmente se detiene el crecimiento de los miomas y pueden comenzar a disminuir debido a la reducción de estrógenos.









Procesos inflamatorios del aparato reproductor femenino

Salpingitis 
 Es la inflamación aislada de las trompas de Falopio. Es, después de la vaginitis, la enfermedad infecciosa más frecuente en los órganos genitales femeninos. 




Ooforitis 



 Es la inflamación, aguda o crónica, de uno o los dos ovarios. Esta enfermedad se presenta frecuentemente en combinación con la salpingitis denominándose salpingooforitis.  






Ooforectomia 

                                                                  
Es la extirpación de un ovario. Puede ser unilateral, cuando se extirpa uno de los dos ovarios, o bilateral cuando son extirpados ambos ovarios.






Salpingectomia 




Extirpación quirúrgica de una o ambas trompas de falopio.






Histerectomia







Operación quirúrgica que consiste en extirpar el útero total o parcialmente.






Histerosalpingooforectomia 




Extirpación quirúrgica de uno o ambos ovarios y trompas junto con el útero, realizada habitualmente para tratar enfermedades neoplásicas malignas del tracto reproductor y la endometriosis crónica. Para evitar la sintomatología intensa de la menopausia repentina, se deja una porción de un ovario, a menos que exista una enfermedad maligna.




Laparoscopia pelvica


Bartolinitis

Es una inflamación de las glándulas de Bartolini, situadas a ambos lados de la vagina, entre los labios menores y la pared de la vagina, cuya función es lubricar la vagina.
Al obstruirse el pequeño orificio por donde sale el liquido secretado por la glándula, ese liquido sigue siendo producido pero al no tener salida se va acumulando y comienza a formarse un bulto en el borde de la vagina, que puede ir creciendo hasta alcanzar el tamaño de una naranja si no se trata. Cuando hay infección , el bulto se llena de liquido purulento de olor desagradable.





lunes, 20 de julio de 2015

Hernia


Hidrocele





Purpura trombositopenica idiopatica

La PTI es un trastorno de la sangre que se caracteriza por una disminución anormal de la cantidad de plaquetas. Las plaquetas son las células de la sangre que ayudan a detener las hemorragias. Una disminución en la cantidad de plaquetas puede producir moretones con facilidad, encías sangrantes y hemorragias internas.
  • "Idiopática" significa que la causa es desconocida.
  • "Trombocitopénica" significa que la cantidad de plaquetas en la sangre es reducida.
  • "Púrpura" se refiere a la coloración púrpura de la piel, como sucede con un moretón.

En Estados Unidos, la PTI afecta a aproximadamente entre cuatro a ocho por cada 100.000 niños menores de 15 años cada año. Existen dos formas de PTI:
Púrpura trombocitopénica aguda: es más frecuente en niños pequeños (de 2 a 6 años de edad). Los síntomas suelen presentarse después de una enfermedad viral, como por ejemplo la varicela. Normalmente, la PTI aguda tiene un comienzo muy repentino y por lo general los síntomas desaparecen en menos de seis meses (incluso en algunas semanas). En general, este trastorno no vuelve a aparecer. La PTI aguda es la forma más común del trastorno.

Púrpura trombocitopénica crónica: este trastorno puede comenzar a cualquier edad, y los síntomas pueden durar como mínimo seis meses o varios años. Esta forma del trastorno es más frecuente entre los adultos que entre los niños, pero también afecta a los adolescentes. En las mujeres, la frecuencia es el doble o el triple que en los hombres. La PTI crónica a menudo suele repetirse, lo que requiere el seguimiento continuo por parte de un especialista de la sangre (hematólogo).
En la mayoría de los casos, se desconocen las causas de la PTI. No es contagiosa, lo que significa que un niño no puede "contraerla" por estar jugando con otro niño que padece PTI. Es importante saber que nada que tengan los padres, ni tampoco el niño, son los causales de este trastorno.
Con frecuencia, es probable que el niño haya tenido un virus o una infección viral aproximadamente tres semanas antes de desarrollar PTI. Se cree que el cuerpo, durante la producción de los anticuerpos que combaten los virus, "accidentalmente" produce un anticuerpo que puede adherirse a las plaquetas. El cuerpo reconoce como extraña a cualquier célula que contenga anticuerpos, y entonces la destruye. ésta es la razón por la cual la PTI también se conoce como púrpura trombocitopénica inmune.
La médula ósea es el tejido blando y esponjoso que está situado en el interior de los huesos y que es responsable de la producción de las células sanguíneas del cuerpo, entre las que se incluyen las plaquetas. La médula ósea responde a la baja cantidad de plaquetas y entonces aumenta la producción de estas células que luego envía al cuerpo. El médico puede analizar las células de la médula ósea y, en los niños con PTI, observará que una gran cantidad de plaquetas jóvenes ha sido producida. Sin embargo, los resultados del análisis de la sangre circulante arrojarán un número muy bajo de plaquetas. El cuerpo produce las células normalmente pero, a la vez, las destruye. En la mayoría de los casos, los demás análisis de sangre son normales, excepto por la poca cantidad de plaquetas. En general, las plaquetas de las personas que sufren PTI sobreviven sólo unas horas, a diferencia de las plaquetas normales, que tienen una vida útil de entre 7 y 10 días.
Las plaquetas son esenciales para el proceso de coagulación de la sangre. Los coágulos de sangre están formados por una masa de fibras y células sanguíneas. Cada vez que una persona se lastima, por ejemplo, las plaquetas se desplazan hasta el área lastimada y se aglutinan formando un trombo. Si la cantidad de plaquetas no es suficiente, y no es posible la formación de un coágulo, el resultado es que la hemorragia no se detiene.
Se han realizado investigaciones para determinar si ciertos medicamentos provocan la PTI. Algunos medicamentos pueden ocasionar una alteración en la función de las plaquetas. .Pero hasta este momento, no se ha comprobado que exista una relación directa entre algún medicamento específico y la PTI.

Cirrosis alcohol nutricional

Causas

La hepatopatía alcohólica ocurre después de años de consumo excesivo de alcohol. El alcohol puede causar inflamación en el hígado. Con el tiempo, se puede presentar cicatrización y cirrosis. La cirrosis es la fase final de la hepatopatía alcohólica.
La hepatopatía alcohólica no se presenta en todos los bebedores empedernidos. Las probabilidades de presentar la enfermedad aumentan según el tiempo que haya estado bebiendo y la cantidad de alcohol que consuma. Usted no tiene que embriagarse enfermarse.
La hepatopatía alcohólica parece ser más común en algunas familias y las mujeres pueden ser más susceptibles a tener este problema que los hombres.

Síntomas

Los síntomas varían con base en la gravedad de la enfermedad y es posible que no se presenten en las etapas iniciales. Los síntomas tienden a ser peores después de un período de consumo excesivo de alcohol.
Los síntomas digestivos son: 
  • Dolor e hinchazón en el abdomen
  • Disminución del apetito y pérdida de peso
  • Náuseas y vómitos
  • Fatiga
  • Boca seca y mucha sed
  • Sangrado de las venas agrandadas en las paredes de la parte inferior del esófago (tubo que conecta la garganta con el estómago)
Problemas de la piel como: 
  • Color amarillo en la piel, las membranas mucosas o los ojos (ictericia)
  • Venas pequeñas y rojas en forma de araña en la piel
  • Piel muy oscura o pálida
  • Enrojecimiento en los pies o las manos
  • Comezón
Los síntomas del cerebro y del sistema nervioso abarcan: 
  • Problemas con el pensamiento, la memoria y el estado de ánimo
  • Desmayos y mareos
  • Entumecimiento en las piernas y los pies

Quiste pilonidal

Habitualmente los quistes pilonidales suelen permanecer asintomáticos, pudiendo descubrirse de forma accidental.
El diagnóstico se realiza solamente por la clínica que presente el paciente. Bastará el examen por parte del especialista para objetivar que existe un quiste pilonidal.
El diagnóstico diferencial debe realizarse con forúnculos, fístulas perianales y osteomielitis de sacro.
El tratamiento del quiste pilonidal se plantea cuando éste se complica y produce sintomatología.
En su fase aguda, en caso de abscesificación, es recomendable el drenaje del material purulento para, en un segundo tiempo, proceder a la extirpación completa de la formación quística y de los trayectos fistulosos secundarios si es que existen.

Colecistitis

Es una hinchazón e irritación repentina de la vesícula biliar que causa dolor abdominal intenso.
La vesícula biliar es un órgano que se encuentra por debajo del hígado. Almacena la bilis, que el cuerpo utiliza para digerir las grasas en el intestino delgado.
La colecistitis aguda se produce cuando la bilis queda atrapada en la vesícula biliar. A menudo esto sucede porque un cálculo biliar bloquea el conducto cístico, el conducto por donde la bilis viaja dentro y fuera de la vesícula biliar. Cuando un calculo bloquea este conducto, la bilis se acumula, causando irritación y presión en la vesícula biliar. Esto puede conducir a hinchazón e infección.
Otras causas abarcan:
  • Enfermedades graves como el VIH o la diabetes
  • Tumores de la vesícula biliar (raro)
Algunas personas tienen mayor riesgo de sufrir cálculos biliares. Los factores de riesgo abarcan:
  • Ser mujer
  • Embarazo
  • Terapia hormonal
  • Edad avanzada
  • Ser nativo americano o hispano
  • Obesidad
  • Bajar o subir de peso rápidamente
  • Diabetes
A veces la vía biliar resulta temporalmente bloqueada. Cuando esto ocurre en forma repetitiva, puede conducir a colecistitis crónica, es decir, hinchazón e irritación que continúan con el tiempo. Finalmente, la vesícula biliar se vuelve gruesa y dura. Tampoco almacena ni secreta bien la bilis.

Trastorno dispepsia

La dispepsia en un trastorno frecuente que afecta hasta el 30 % de la población general. Los síntomas de dispepsia incluyen dolor o molestias en el abdomen superior así como síntomas de quemazón, presión o plenitud. Estos síntomas están relacionados, muchas veces, aunque no necesariamente, con la comidas. Otros síntomas frecuentes son la sensación de plenitud temprana (saciedad precoz), náuseas, eructos y distensión. Mientras los síntomas de dispepsia pueden desarrollarse debido a enfermedades como la úlcera péptica o la gastritis, la gran mayoría de los pacientes con síntomas de dispepsia tienen diagnóstico de dispepsia funcional. La dispepsia funcional (DF) es un trastorno heterogéneo; dicho en otras palabras, una variedad de causas pueden llevar a tener síntomas similares. Algunos estudios sugieren que la DF es una condición crónica para muchos pacientes, con un 50% de pacientes aproximadamente, que continúan experimentando síntomas luego de 5 años de seguimiento.
Mientras que la definición de DF ha cambiado a lo largo de los años, el trastorno es generalmente considerado como un grupo de síntomas que se originan en el tracto gastrointestinal superior (estómago e intestino delgado superior) en ausencia de cualquier causa estructural (orgánica) o enfermedad metabólica que pudiera explicar los síntomas.
Lamentablemente, los síntomas de DF no proveen una guía confiable para la terapeútica.
Las causas de dispepsia funcional son desconocidas y probablemente múltiples. Existe alguna evidencia que implica cierta predisposición genética. Aunque la infección por Helicobacter pylori puede producir síntomas de dispepsia en un pequeño grupo de pacientes, existe poca información para apoyar el rol de esta bacteria como causante de los síntomas en la mayoría de los pacientes. Los factores psicológicos pueden influir en la experiencia del síntoma en algunos pacientes con dispepsia funcional.
Se han identificado cambios en la función gástrica en muchos pacientes con DF. En aproximadamente 40% de los pacientes con dispepsia, el estómago no se relaja normalmente en respuesta a una comida. Esto se conoce como “alteración en la acomodación gástrica” y puede estar asociada con síntomas de plenitud y presión en algunos pacientes. También se observan alteraciones de las contracciones y del vaciamiento gástrico en un porcentaje similar de pacientes. La alteración del vaciamiento gástrico ha sido asociada con síntomas de distensión y sensación de plenitud temprana. Al menos dos tercios de los pacientes con dispepsia funcional presentan mayor percepción de la actividad gástrica, lo que se denomina hipersensibilidad visceral.
Frecuentemente observada en la dispepsia funcional, la hipersensibilidad visceral no se encuentra especialmente asociada con ningún síntoma específico.

Signo de cabeza de meduza

 Venas varicosas que irradian del ombligo en pacientes con cirrosis hepática y marcada hipertensión portal, como consecuencia de la recanalización de la vena umbilical. Dilatación de las arterias ciliares que rodean al limbo escleral en la rubeosis del iris. 

domingo, 19 de julio de 2015

Tórax flotante


Embolia pulmonar

O tromboembolismo pulmonar (TEP) es una enfermedad potencialmente mortal que se produce cuando partes de un trombo se desprenden desde alguna parte del territorio venoso, migra y se enclava en las arterias pulmonares. En la mayoría de las ocasiones, los émbolos proceden de una trombosis venosa profunda de las extremidades inferiores.
“Entre los factores predisponentes relacionados con el paciente se incluye la edad, los antecedentes de enfermedad tromboembolica previa, el cáncer activo, las enfermedades neurológicas con parálisis de extremidades, los trastornos médicos que requieren reposo prolongado en cama, como la insuficiencia cardiaca o respiratoria, la trombofilia congénita o adquirida, la terapia hormonal sustitutiva y el empleo de anticonceptivos orales”.
El especialista de Separ indica que en la mayor parte de los casos, la embolia pulmonar se asocia a factores de riesgo desencadenantes, calificándose como provocada o secundaria. Cuando no se identifican factores predisponentes se denomina no provocada, espontánea o idiopática.
“Los traumatismos graves, la cirugía mayor, las lesiones de miembros inferiores y el daño espinal son factores de riesgo mayores para desarrollar esta enfermedad. Otro factor predisponente bien conocido es el cáncer  aunque el riesgo varía según el tipo de tumor”, matiza. “Así, por ejemplo, las neoplasias hematológicas, el cáncer de pulmón , los tumores gastrointestinales, el cáncer de páncreas y los tumores del sistema nervioso central se asocian a un riesgo mayor de complicaciones trombóticas”.
Por otra parte, De Miguel, indica que la trombofilia hereditaria aumenta el riesgo de embolia pulmonar “Las dos mutaciones autosómicas dominantes más frecuentes son el factor V Leiden (que produce resistencia a la proteína C activada) y la mutación del gen de la protrombina (que aumenta la concentración plasmática de protrombina). Las deficiencias de antitrombina III, proteína C y proteína S son mucho más infrecuentes. Además, el síndrome antifosfolípido es la causa más frecuente de trombofilia adquirida y aumenta el riesgo de trombosis arterial y venosa”.
En las mujeres fértiles, el empleo de anticonceptivos orales es el factor predisponente más frecuente. Para las pacientes embarazadas el riesgo mayor se produce durante el tercer trimestre y en las 6 semanas posteriores al parto.La fertilización in vitro también aumenta el riesgo de enfermedad tromboembólica venosa. Por último, en las mujeres postmenopáusicas que reciben terapia hormonal sustitutiva, el riesgo es variable en función de la composición hormonal del medicamento utilizado.